Cartas filosóficas

Sinopsis

Estas Cartas filosóficas son una amplia selección de las Epístolas morales a Lucilio, que el cordobés Lucio Anneo Séneca el Joven o el Filósofo (c. 4 a.C.-65 d.C.) dirigió a su joven amigo y discípulo, procurador imperial en la provincia de Sicilia en los años finales de la vida de Séneca en que se escribieron.

Las epístolas son de contenido filosófico y filiación estoica y en gran parte están presentadas como las respuestas del maestro a problemas de orden teórico o práctico (de pensamiento o de conducta) que le habría planteado su joven amigo. En ellas se encierra, de un modo aparentemente asistemático pero en realidad muy coherente, la peculiar versión del estoicismo que es la filosofía de Séneca.

Estas Cartas filosóficas son un texto muy romano, no sólo por la frecuente referencia a aspectos de la vida del autor y del destinatario (viajes, costumbres, personajes, historias, tradiciones, etc.), sino por la seriedad moral y el sentido de la responsabilidad social del sabio que emergen en ellas y por las citas literarias que embellecen el texto. Séneca reduce a límites exiguos problemas morales, creando así una especie de ensayos acerca de temas de importancia excepcional en la historia del pensamiento.